Casas robustas llenas de color son testigos de historia y relatos que brindan, a quienes deambulan por las 227 cuadras del Centro Histórico de Oaxaca, una espectacular muestra del urbanismo colonial español que caracteriza a esta bella ciudad. Sus grandes ventanales y puertas cuentan con trabajos herrerías que dan la falsa idea de haber sido labrados fácilmente, estos los protegen de todos los peligros, excepto uno… el tiempo.

Perderse por las calles es una de las mejores formas de inmersión en la vida cotidiana de esta ciudad, así fue como me sucedió este proyecto que realicé con cámara en mano acompañado de mi madre mientras disfrutábamos de ese multicolor y variedad mientras elegíamos siempre calles diferentes para redescubrirla.

Ahora con Fachadas de Oaxaca podrás tener un pedacito de esta ciudad en tu rincón favorito como testimonio de su belleza y colorido.

Y porque no solo en Oaxaca hay bella arquitectura, se une a este proyecto la versión Puebla.